Descubre los 5 rostros del insomnio: un estudio español revela la complejidad del trastorno
Un estudio español descubre que el insomnio no es un trastorno único, sino que se divide en cinco subtipos distintos basados en los rasgos de personalidad y la biografía de cada paciente.
Un equipo de investigadores españoles ha realizado un estudio que cambia la forma en que entendemos el insomnio. Según sus hallazgos, este trastorno no es único, sino que se divide en cinco subtipos distintos. Esta clasificación se basa en los rasgos de personalidad y la biografía de cada paciente, lo que promete revolucionar el tratamiento del insomnio.
El estudio que cambia todo
Publicado en el Journal of Sleep Research, el estudio confirma lo que muchos especialistas sospechaban: el insomnio no es un trastorno homogéneo. La investigación, liderada por Francesa Cañellas del Hospital Universitario de Son Espases, analiza datos de ocho unidades de sueño en España utilizando el Cuestionario de Tipos de Insomnio (ITQ). Los resultados revelan la existencia de cinco perfiles de insomnio diferentes.
Los cinco tipos de insomnio
- Tipo 1: Pacientes con alta angustia, neuroticismo, tensión y depresión.
- Tipo 2: Pacientes con angustia moderada que pueden responder a la terapia cognitivo-conductual.
- Tipo 3: Pacientes con poca angustia pero con anhedonia, lo que hace que los tratamientos convencionales sean menos eficaces.
- Tipo 4 y 5: Formas más leves del insomnio, asociadas a problemas puntuales en la vida del paciente que aumentan su nivel de estrés.
La mala noticia es que el 82% de los pacientes pertenecen a los subtipos 1 y 3, los cuales responden peor a los tratamientos y generan un mayor daño psicológico. Esto subraya la necesidad de un enfoque más personalizado y preciso en el tratamiento del insomnio.
Hacia una medicina de precisión
El estudio destaca la importancia de considerar la biografía y la personalidad de cada paciente al abordar el tratamiento del insomnio. Un paciente del tipo 2 puede beneficiarse de la terapia psicológica, mientras que un paciente del tipo 1 puede requerir un abordaje psiquiátrico para tratar la angustia subyacente. Este enfoque promete mejorar significativamente los resultados de los tratamientos y la calidad de vida de los pacientes.
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