El Gobierno apunta a reformar la Ley de Salud Mental en 2026

El Gobierno busca modificar la Ley de Salud Mental para mejorar la atención a pacientes con trastornos mentales y adicciones

La iniciativa busca abordar limitaciones en la aplicación de la ley actual

El presidente Javier Milei y su equipo están trabajando en un proyecto para modificar la Ley de Salud Mental, que data de 2010. La idea es presentar este proyecto durante las sesiones ordinarias del Congreso, que comienzan el 1° de marzo.

Internaciones involuntarias, un punto clave de debate

Uno de los puntos que se busca cambiar es el artículo que regula las internaciones involuntarias. El objetivo es permitir que los jueces puedan autorizar la hospitalización en determinados casos, lo que ha sido un reclamo de las familias de pacientes y profesionales de la salud.

Un objetivo: crear centros especializados y mejorar la atención

El Ministerio de Salud, liderado por Mario Lugones, busca avanzar en la creación de centros especializados y mejorar la atención a pacientes con trastornos mentales y adicciones. La intención es recuperar aspectos que funcionaban bien en la ley anterior y que se perdieron en la ley actual.

Polémica y desafíos en la aplicación de la ley

La Ley de Salud Mental ha generado polémica desde su promulgación en 2010. La falta de dispositivos necesarios para su correcta aplicación ha limitado su efectividad. Ahora, el Gobierno busca insistir en los cambios necesarios para mejorar la atención a los pacientes y sus familias.

Casos que impulsan el cambio

El caso del efectivo de la Policía Federal Juan Pablo Roldán, asesinado por un hombre con problemas de salud mental, ha sido citado como un ejemplo de la necesidad de cambiar la ley. Además, la mamá del músico Chano Moreno Charpentier, Marina Charpentier, ha expuesto en el Congreso la necesidad de aclarar definiciones difusas y falta de herramientas para contener situaciones de brotes y episodios agudos.

Un llamado a la acción

Marina Charpentier ha calificado el presupuesto destinado a salud mental como ‘un chiste’, ya que solo se destina un 10% del presupuesto de salud. Es hora de tomar medidas efectivas para abordar esta problemática y mejorar la atención a los pacientes y sus familias.

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